Joaquín
Sabina escribió en una de sus tantas geniales canciones “al lugar
donde fuiste feliz nunca debes tratar de volver”. Supongo que a lo
que él se refiere entonando esa estrofa, es a la torpeza de intentar
revivir algo que uno guarda con muy buen sabor de boca, creyendo que
simplemente es cuestión de estar de nuevo en el mismo sitio…
Hay
más jugarretas del estilo y sin darnos cuenta no es tan raro que nos
empeñemos en estampanarnos contra ellas. La vivida recientemente, es
haber sido tan incauta de imaginarme como serían muchas horas de mi
día a día, con algo que todavía no había ocurrido y que ni
siquiera tenía el grado de certeza. Y así más de una y de dos
veces, en ocasiones con los ojos cerrados y otras abiertos, he visto
nítidamente muchos momentos recreados paso a paso en mi cabeza.
Estoy casi segura de que hubieran sido agradables de haberlos vivido,
solo que fruto de esa no-realidad, es probable que les añadiese
además algunas otras bondades.